La enorme expectativa que demostraba el público presente se vio reflejada en la primera jornada. Familias enteras se agolpaban frente a los stands observando con gran atención los trabajos realizados por los artesanos presentes.
Al momento de consultar a una pareja de concurrentes sostenían: “la feria está muy linda, variada, aunque un poco cara”, comentario éste que fue del común de la gente. “Están un poco más organizados que la última vez, a pesar del corte de luz que hubo al principio”, sostuvo otro de los visitantes.
Se pudo observar durante el transcurso de la apertura de la feria, que quienes se dieron cita no vieron con buenos ojos lo elevado de los precios, sin desmerecer la calidad de lo expuesto en el lugar. “No nos da el presupuesto” dijo alguien al pasar.
Redacción y foto: Gustavo Gauna
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